La Agencia Nacional de Seguridad Vial y el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires pusieron nuevamente en marcha el sistema de fotomultas en la Panamericana Acceso Norte y Oeste.
Las multas habían quedado suspendidas el pasado 20 de marzo, cuando se dispuso por decreto la cuarentena obligatoria por el coronavirus.
Sin embargo, tras las flexibilizaciones que se fueron dando con el correr de las semanas, y sobre todo tras la última, eso se tradujo en un importante incremento de la circulación de vehículos, por lo que la Agencia de Seguridad Vial dispuso que los cinemómetros, tanto fijos como móviles, vuelvan a activarse.
Se pondrán en operación los 10 cinemómetros fijos montados en los puentes de las autopistas y se prevé la instalación de nuevos equipos, informaron desde la Agencia, cuyos equipos monitorearán la velocidad máximo de los rodados, 130 kilómetros por hora. En Pilar, el cinemómetro fijo se ubica a la altura aproximadamente del KM 43 de la autopista.
Al analizar la siniestralidad vial en las autopistas durante marzo, abril y mayo, se observó una caída significativa al comienzo del aislamiento desde el 20 de marzo, donde se redujo un 90% la cantidad de incidentes.
"Notamos este ascenso y sabemos que el exceso de velocidad es el principal factor de riesgo vial. No podemos permitir que las camas de terapia que están disponibles para atender la emergencia por la pandemia se ocupen con heridos por siniestros viales evitables", dijo el director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano.
"Bajar la velocidad es una forma simple y efectiva de cuidarnos y por eso vamos a controlar en conjunto con el gobierno provincial y los municipios.", continuó.
La multa por exceso de velocidad va de 150 a 1000 UF, de acuerdo con la normativa provincial. La UF (unidad fija) está en $ 63,09. El valor inicial del pago voluntario, con un descuento del 50 ciento es de $ 4.731,75.