La iniciativa fue aprobada esta tarde por unanimidad y girada a la Cámara baja para su sanción. Durante el debate en la comisión de Legislación General del Senado bonaerense se oyó a Ian Galo Lescano, un niño que tiene el síndrome del espectro autista, un influencer de 9 años que expresó que “está ley está buenísima porque la pirotecnia puede ser muy dañina para nosotros. También queremos la ley a nivel nacional pero hay que ir pasito a pasito”.
El proyecto de “pirotécnica cero” excluye de la prohibición a los “artificios de uso práctico” que se emplean en ferrocarriles, en transportes terrestres y aéreos, en sectores agropecuarios o industriales, en la navegación marítima y fluvial, y en las fuerzas de seguridad, y también los que se manipulan en casos de localización de personas, sistemas de seguridad, detección de incendios y emergencias, entre otros.
En el artículo 3 se prohíbe la “comercialización, la venta al público mayorista o minorista, la venta ambulante en la vía pública y el uso particular de artificios pirotécnicos y de cohetería de uso recreativo de alto impacto sonoro, cualquiera fuera su característica y naturaleza, como así también los denominados globos aerostáticos de pirotecnia”.
Además, también introduce una regulación para los actos oficiales al prohibir “la adquisición y uso por parte del sector público provincial, de todo artificio pirotécnico o de cohetería, sea de bajo o alto impacto sonoro, en los eventos y/o espectáculos que organice”.
El proyecto aprobado en la cámara alta provincial establece “multas de entre cinco y cincuenta haberes mensuales de Agentes de Seguridad (Agrupamiento Comando) de la Policía de la provincia de Buenos Aires” para las personas físicas y clausuras de entre cinco a diez días a los comerciantes que vendan “en forma mayorista o minorista” artificios o cohetería.
El dinero recaudado irá para campañas de concientización y capacitaciones para el personal de control. (DIB)