La semana pasada, tres camiones chocaron su carga contra uno de los puentes de la Autopista Panamericana, episodios que volvieron a poner en discusión la altura que poseen los pasos.

Los hechos se produjeron en el Puente de la calle Las Magnolias a la altura del reconocido KM 50, un sitio que hasta el momento no registraba casos repetitivos, como por ejemplo sí ocurría en el de la calle Florida, antes de que éste fuera elevado.

Consultados por Pilar de Todos, desde Autopistas del Sol, concesionaria de la ruta, señalaron que los impactos, que no generaron situaciones graves, aunque sí congestiones en el tránsito, responde a la “negligencia de algunos transportistas” y agregaron que “todos los puentes de la Autopista cuentan con la altura de paso libre superior a los 4,10 metros”.

Alejandra Barczuk, Jefa de Relaciones Institucionales de AUSOL, remarcó que esa es la altura “establecida por Vialidad Nacional, y que consta en la legislación vigente”.

“No hay ningún puente que esté por debajo de esa cota. E incluso, algunos puentes superan esa medida”, aclaró Barczuk en diálogo con este medio.

Además, consignó que el puente en el que se produjeron los atascamientos “cuenta con altura libre de paso de 4,32 mts en la parte más baja”, es decir 22 centímetros más por sobre lo establecido.

“Hay negligencia de algunos transportistas que no respetan la altura que tienen que llevar en sus cargas”, enfatizó la vocera de AUSOL, quien agregó que además de que los puentes cumplen con las alturas, cada una de ellas está informada con carteles para que los conductores que superen las medidas salgan de la traza principal.

Barczuk, además adelantó que justamente el puente de Las Magnolias será el próximo que será elevado, entre otras mejoras estructurales con las que se buscará alivianar la congestión de tránsito que se produce allí.

“Magnolias es un puente donde, a los costados, se les generó un polo habitacional, comercial, educativo, y de salud que complicó la zona, porque surgió sin planificación urbana”, analizó Barczuk.

Por lo tanto, en la actualidad el puente debe absorber tránsito de todo tipo. “Ha quedado desproporcionado y obsoleto en relación a lo que necesita alimentar en esa intersección”, consideró.

Es por eso que la idea, una vez que Vialidad avance con los permisos para el inicio de la obra, es generar una mejora con distribuidores y pares rotatorios – es decir puentes de manos únicas como ocurre en Champagnat – para desagotar adecuadamente los puntos clave de circulación.