Los ediles Inés Ricci y Flavio Álvarez, de la bancada Comunidad Pilarense, presentaron un proyecto de comunicación por medio del cual apuntan a que se establezca un protocolo para el tratamiento de cuerpos de personas que fallecieron por COVID-19.

El texto surgió luego de que se produjera el primer fallecimiento en Pilar, e incluso desde la funeraria mostraran su preocupación respecto a cómo manejarse en esos casos.

Si bien desde el Ministerio de la Nación emitieron una serie de recomendaciones, como la colocación del cuerpo en bolsas impermeables y herméticas, y que a su vez estas sean rociadas con desinfectante hospitalario, dentro de la habitación aislada donde se produjo el deceso, estas prácticas buscan que sean obligatorias.

El Ministerio de la Nación, de hecho, también recomienda que el personal que maneja los cuerpos uso equipos de seguridad, restringe la cantidad de gente que puede concurrir a los funerales, y de hecho menciona que las personas fallecidas aún pueden mantener en sus órganos  y pulmones carga viral activa.

“La preocupación de la Asociación de Empresas de Servicios Fúnebres se trasladó a la órbita de nuestro distrito ante el primer caso de un vecino de Pilar fallecido a causa de COVID-19, donde la funeraria que realizó el servició, adhiere a la necesidad de solicitar la utilización de un protocolo de manejo de cadáveres infectados y no una recomendación como la que dispone el Ministerio de Salud de la Nación”, señalaron Ricci y Álvarez.

“La Asociación de Empresas de Servicios Fúnebres de la Provincia de Buenos Aires (ASEF), en reiteradas ocasiones solicitó una reunión para avanzar en la realización de ‘un protocolo de manejo de cadáveres infectados de coronavirus o que presenten algún diagnóstico similar o compatible’ ya que ‘no cuentan con instrucciones a seguir frente a la pandemia’, no siendo atendidos por el ministro de salud Ginés González García”, añadieron los concejales.

En ese contexto, solicitaron por medio del proyecto que en primer lugar “la Municipalidad de Pilar informe a este Honorable Concejo Deliberante, los protocolos que se llevan a cabo actualmente, desde que el paciente infectado con COVID-19 o enfermedades compatibles o similares fallece” y “cuáles son las medidas de seguridad que la Municipalidad de Pilar adopta para evitar un posible contagio de la pandemia post mortem”.

La consulta también apunta a saber si el municipio “cuenta con bolsas plásticas de alta densidad, impermeables y con cierre hermético, debidamente identificadas como material infectocontagioso, que reúna todas las características técnicas, sanitarias, de resistencia a la presión de gases en su interior, estanqueidad e impermeabilidad”.

Además se pide que “se informe el destino de los cadáveres”, es decir si “una vez puesto en el ataúd, es enviado a una fosa, bóveda o nicho para su inhumación”. “De ser así, indique si existe un cementerio municipal o privado, sección y/o fracción especial para el destino de los cuerpos sospechados o infectados por COVID-19”.

 “Si son enterrados en cementerios privados o municipales, indique si los empleados poseen los elementos de seguridad correspondientes para realizar la inhumación del mismo” y “en los casos que los cuerpos sospechados o infectados de COVID-19 deban ser cremados, informe si existe algún cementerio privado que brinde ese servicio”.

La comunicación, además, reclama saber cuáles son las funerarias “autorizadas para el manejo de cadáveres por COVID-19, similares o compatibles” y que se informe sobre los “controles que este municipio realiza ante la o las empresas funerarias, a saber, si cumplen con recomendaciones de seguridad del Ministerio de Salud de la Nación”.