El Presidente Alberto Fernández propuso donar dos sueldos para reparar el "daño potencial" que se pudiera haber generado por el festejo en Olivos que se realizó en medio de la cuarentena estricta en julio del año pasado.
En ese momento, en la Quinta Presidencial la Primera Dama, Fabiola Yañez, festejó su cumpleaños junto con el propio Fernández y un grupo de amigos y allegados, cuando esos encuentros estaban expresamente prohibidos por la legislación vigente dictada, justamente, por el Presidente mediante un DNU.
Fernández se presentó esta tarde a la Justicia «por derecho propio y sin abogado patrocinante» a los efectos de plantear la «reparación del daño potencial que se hubiere causado» ese festejo, ofreciendo depositar durante cuatro meses consecutivos la mitad de su salario al Instituto Malbrán, indicaron fuentes del gobierno nacional a Pilar de Todos.
El Presidente entregó un escrito de 36 páginas al juez Sebastián Casanello, donde dijo que el festejo, concretado el 14 de julio, "fue un encuentro que jamás debió haber ocurrido, producto de la imprudencia, pero que en modo alguno puede constituir un delito".
"El momento particular de la foto que trascendió, tal como se reconoció desde un comienzo, fue la excepción dentro de la reunión donde fuera de ese momento concreto se respetaron los protocolos controlados por el personal asignado a la quinta de Olivos", sostuvo el Presidente ante la Justicia.