La cámara de Diputados tratará la semana que viene la reposición de la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias -rebautizado ahora Ingresos Personales- como parte de un “paquete fiscal” que también incluirá cambios al monotributo y Bienes Personales, además de un nuevo blanqueo de capitales y una moratoria impositiva.
La posibilidad de avanzar en la llamada Ley de Medidas Fiscales, Paliativas y Relevantes quedó habilitada luego del dictamen favorable de la Comisión de Presupuesto -presidida por José Luis Espert- que logró 27 firmas de respaldo. Lo acompañaron representantes de La Libertad Avanza, el PRO y la UCR.
El cambio más importante en el ahora llamado Impuesto a los Ingresos Personales es la marcha atrás con la eliminación de la cuarta categoría que había dispuesto Sergio Massa cuando era ministro de Economía-y el Congreso Había ratificado, con el voto a favor del ahora presidente Javier Milei.
Luego de varias instancias de negociación entre el Gobierno, las provincias y los bloques de la oposición dialoguista, se definió que el mínimo no imponible estará ubicado en 1.800.000 pesos para trabajadores solteros y en 2.200.000 pesos para casados con hijos. De esta manera, volverán a estar alcanzados por este tributo casi un millón de personas.
La actualización del mínimo no imponible y del piso de cada una de las escalas se realizará de forma semestral a partir del 2025 aunque este año habrá un ajuste trimestral en septiembre, en base a la variación del IPC.
A la vez, el proyecto establece una fuerte rebaja en Bienes Personales: el mínimo no imponible subirá de $ 11 a $ 100 millones y la deducción por la vivienda familiar pasará de $ 56 a $ 350 millones, lo que implica que se reducirá la base de contribuyentes alcanzados. Estos importes se ajustarán cada año en función de la variación anual de la inflación difundida por el INDEC. Otro de los beneficios es la reducción gradual de la escala de alícuotas progresivas, eliminándose la discriminación existente para bienes situados en el exterior.
En cuanto al Monotributo, el proyecto plantea un aumento tanto de los niveles de facturación –con un tope máximo de $68 millones anuales- como la cuota mensual a pagar. Esos aumentos oscilan entre el 200 y el 300%, según la categoría. Asimismo, se amplían los límites de facturación de locaciones y servicios, con nuevas categorías para este segmento, igualándolas a la de venta de cosas muebles.
Se incluye además una amplia moratoria que permitirá pagar las obligaciones impositivas y de la seguridad social vencidas al 31 de marzo de 2024 en hasta 84 cuotas con diversos beneficios como la condonación de la totalidad de las multas y de hasta el 70% de los intereses por los saldos adeudados, dependiendo la modalidad de pago.
En el capitulo del Blanqueo, se dispone que los activos por hasta los US$ 100.000 tendrán una alícuota del 0%, mientras que los montos superiores abonarán alícuotas crecientes en función del momento en que ingresen. En la primera etapa, que se extenderá hasta el 30 de septiembre de 2024, la tasa sobre el excedente será del 5%; en la segunda etapa, hasta el 31 de diciembre de 2024, será del 10%; y en la tercera, hasta el 31 de marzo de 2025, del 15%. (DIB)