El abogado del viudo Carlos Carrascosa y de la hermana de María Marta García Belsunce denunció al fiscal que instruyó la causa, Diego Molina Pico, por "encubrimiento agravado".
El letrado, Gustavo Hechem, consideró que Molina Pico favoreció a Nicolás Pachelo, actualmente sometido a juicio, lo que impidió que se conozca, hasta ahora, su responsabilidad en el crimen de la socióloga, asesinada de cinco disparos en la cabeza en el country Carmel de Pilar, en 2002.
La denuncia fue presentada ante la Fiscalía General de San Isidro por Hechem, quien representa a Carrascosa y a María Laura García Belsunce como particulares damnificados en el debate que se les sigue a Pachelo y a dos exvigiladores del Carmel, consignó la agencia estatal Télam.
Hechem manifestó que Molina Pico, quien fue el instructor de la causa cuando el 27 de octubre de 2002 María Marta fue hallada muerta en su casa del Carmel, cometió hechos de gravedad institucional durante su desempeño en la investigación, añadieron los voceros.
La denuncia se fundamenta en manifestaciones realizadas por testigos que declararon en las últimas dos semanas durante el juicio en el TOC 4 de San Isidro, quienes aseguraron que Molina Pico se negó a investigar a pista que conducía a Pachelo como sospechoso.
La presentación también hizo referencia a una serie de escuchas telefónicas obtenidas de la investigación que hasta ahora no se habían conocido y que permiten, entre otras cosas, conocer el acceso a información privilegiada que obtenía el defensor de Pachelo, Roberto Ribas, mientras el exvecino era testigo en la causa.
"Los testimonios fueron elocuentes respecto de la obstaculización de la hipótesis Pachelo, y hay pruebas de una posible connivencia con su asesor jurídico de esa época", dijo Hechem en declaraciones a Télam.
A pesar de los cuestionamientos y de que en 2011 los entonces abogados del viudo pidieron un jury para Molina Pico, éste es actualmente se desempeña como fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Flagrancia de San Isidro.
"Fue el principal encubridor", "había una vocación por rehuir todo lo que involucrara a Nicolás Pachelo" y "la causa estaba unidireccionada"; fueron algunos de los duros cuestionamientos vertidos hasta el momento en el juicio al exvecino por los testigos que se refirieron a la labor de Molina Pico.
Para Alejandro Arauz Castex, quien vivió en Carmel y conformó la Comisión de Seguridad del country, el fiscal tuvo "premeditación" para evitar investigar a Pachelo. "No tiene perdón de Dios. Fue una investigación inconducente, guiada por una persona dispuesta a entorpecerla y encubrirla. Y lo logró, pasaron veinte años y lo logró", afirmó.
A ese testimonio crítico hacia la actuación fiscal de primera instancia, se sumaron los de dos exjefes policiales que tuvieron a su cargo las primeras diligencias del caso.
Tanto el comisario general retirado Ángel Beserra como el comisario mayor retirado Alejandro Elorz, quienes estaban a cargo de la Sub Delegación Departamental de Investigaciones (SubDDI) de Pilar al momento del hecho, coincidieron en que la hipótesis que llevaba a Pachelo era "altamente positiva", aunque Molina Pico realizó "una investigación unidireccionada" hacia a la familia de la víctima.
"Para mí fue Pachelo", sostuvo Beserra al apuntar a la autoría del crimen, mientras que Elorz dijo que la policía fue "solapadamente corrida" de la pesquisa.
"Teníamos elementos para ahondar en la investigación sobre Pachelo. Había hablado con Molina Pico, pero fue una investigación unidireccionada. Nosotros no participamos de la investigación, fue de la Procuración", dijo.
A su vez, otros testigos se refirieron a los robos previos cometidos en el Carmel y atribuidos a Pachelo, quien para los fiscales del juicio empleaba siempre un mismo modus operandi: entraba a las casas cuando no había nadie, en general los domingos entre las 18 y las 19, cuando se producía el cambio de guardia de vigiladores.
En ese sentido, Aníbal Pigoni, vecino del Carmel, recordó que "unos 15 días antes" del crimen, justamente un domingo entre las 18.30 y 19.30, le robaron algunas pertenencias, entre ellas varios palos de golf, que fueron hallados luego en una tienda a nombre de Nicolás Ryan, apellido de la madre de Pachelo.
Luego, el matrimonio de vecinos compuesto por Nicolás González del Cerro y María José Díaz Herrera coincidió en que el acusado Pachelo "era capaz de cualquier cosa".
Mientras que Fernando Sansute, expresidente de Carmel, quien sufrió el robo de palos de golf 15 días antes de la muerte de García Belsunce, recordó que dentro del country se corría el rumor de que "Pachelo tenía algo que ver" con el crimen de la socióloga.
Los testimonios de la última semana del debate avalaron la hipótesis de los fiscales de juicio Patricio Ferrari, Andrés Quintana y Federico González, quienes intentan demostrar que Pachelo mató a María Marta cuando lo sorprendió robando en su casa.
En ese marco, los fiscales apuntan a que Pachelo contó con la colaboración de dos exvigiladores de Carmel, Norberto Glennon (57) y José Ortíz (45), quienes también están acusados en este juicio, pero que hasta el momento no fueron mencionados.
El tercer juicio por el caso se reanudará este martes a las 10.30, ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 sanisidrense, con la declaración de testigos propuestos por la fiscalía para abordar el tema de los delitos cometidos presuntamente por el exvecino antes del crimen de la socióloga y en el mismo country.