La Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires rechazó un amparo que buscaba que se retomen las clases presenciales en distritos bonaerenses, donde actualmente se dictan de modo virtual.
Los jueces del máximo tribunal de la Provincia Luis Genoud, Daniel Soria, Sergio Torres e Hilda Kogan, decidieron que la Suprema Corte no es el tribunal originario para iniciar la causa, sino que debe presentarse en un juzgado de primera instancia. Así, los magistrados calificaron de “inviable” el planteo, presentado por padres y madres de dos alumnas que concurren a colegios de San isidro.
En su resolución, los jueces señalaron que la demanda es contra una decisión federal, del gobierno nacional y que por lo tanto no tiene competencia originaria para intervenir.
“Es inviable promover en esta sede, como núcleo argumental de la acción, el cuestionamiento a una disposición federal”, sostiene la Suprema Corte.
El amparo fue presentado por el abogado Diego Isabella, en representación de los padres de dos niñas, contra los decretos 241 y 287 del Ejecutivo Nacional y contra los del gobernador Axel Kicillof, a los que adhirió, en los que se estableció la educación virtual en el conurbano bonaerense ante el incremento de contagios de Covid-19.
El letrado reclamante argumentó en su demanda que la decisión del Gobierno nacional no estaba fundada en datos epidemiológicos concretos sino en estadísticas genéricas.
Además, sostuvo que la decisión viola la autonomía de la provincia e invocó el fallo de la Corte Suprema de la Nación que avaló la postura de Horacio Rodríguez Larreta.
La Corte bonaerense había rechazado el 26 de abril una medida cautelar y ahora hizo lo propio con el amparo. Respecto a la resolución de la Corte Suprema sobre las clases en la ciudad, los magistrados precisaron: “Se refirió únicamente al aspecto competencial del conflicto desatado a raíz de las restricciones al servicio educativo presencial” en la Ciudad de Buenos Aires.
Las clases virtuales se realizan en la mayoría de los distritos de la provincia de Buenos Aires, ya que están en fase 2 o en zona de alerta epidemiológica, que es donde se registra una incidencia acumulada para 14 días( cantidad de casos cada 100.000 habitantes en ese período) igual o mayor a 500, siendo que los distritos del AMBA, por ejemplo, están en torno a una incidencia de 1.000, como es el caso de Pilar.
De hecho, el jefe de Gabinete bonaerense, Carlos Bianco, aseguró que lo mejor es continuar con esa modalidad después del 11 de junio, cuando finalicen las actuales medidas de restricción.
“Tenemos dos semanas de caídas de casos, pero fue una caída desde un pico muy alto, de más de 12 mil casos; ahora estamos en 10 mil casos promedio, se redujo un 17 por ciento. No sería recomendado volver a las clases presenciales”, explicó Bianco.