La Cámara de Comercio e Industria de Pilar (SCIPA) dio a conocer su último informe sobre el nivel de ventas minoristas en la localidad, destacando una preocupante caída del 10,37% en promedio en julio, comparado con el mismo mes del año anterior.
El descenso se observa a través del relevamiento de 12 rubros comerciales, lo que refleja la continua dificultad que enfrenta el sector en la región, afectado por la brutal recesión que afecta a todo el país.
El informe detalla que los sectores más afectados fueron "Materiales para la construcción", con una disminución del 30%, seguido por "Venta de alimentos elaborados", que registró una baja del 28%, y "Servicios para la construcción", con un retroceso del 23%. Los rubros de "Alimentos y Bebidas" y "Calzados y Marroquinería" también mostraron caídas significativas, del 20,50% y 10% respectivamente.
Sin embargo, no todos los sectores experimentaron caídas. "Gastronomía y Bares" registró un crecimiento del 10%, mientras que "Perfumería" vio un leve aumento del 3,20%.
A pesar de estas excepciones, el balance general muestra un panorama negativo para el comercio pilarense.
Según SCIPA, la caída de las ventas en julio fue menor en comparación con los meses anteriores, atribuida en parte al impacto positivo del cobro del aguinaldo y las vacaciones escolares. Estos factores ayudaron a amortiguar la caída, pero no lograron revertir la tendencia negativa general.
Además, el informe subraya que la baja rentabilidad del sector sigue siendo una preocupación central. Los comerciantes continúan enfrentando aumentos en los costos que agrava la situación de muchos negocios locales. La combinación de menores ventas y mayores costos coloca al sector comercial en una posición crítica, con pocas señales de mejora a corto plazo.
"Con respecto a los anteriores meses, puede observarse una menor caída en las ventas de julio, en la comparativa a valores de reposición. Esto se puede atribuir al empuje del cobro de aguinaldo, como así también a las vacaciones escolares, lo que amortiguó la caída" explicaron desde la entidad presidida por Cristian Hait.
"Pero en contrapartida siguen aumentando la baja rentabilidad, producto de los aumentos de servicios, alquileres, tasas e impuestos. Lo que sigue manteniendo al sector en general en una difícil situación", añadieron desde SCIPA.