Alan Muñoz volvió a nacer. Una tarde de 2013 su corazón, cuando apenas tenía 17 años, se detuvo mientras jugaba un partido de fútbol, en el barrio San Jorge.
Pero el año pasado, Alan tuvo que volver a desafiar a la muerte. Durante 6 meses estuvo internado en el Sanguinetti nuevamente, esperando que el gobierno anterior le consiga un cardiodesfibrilador.
Recién cuando el tema tomo estado público en los medios y se hiciera eco en la oposición de aquel entonces, se logró el objetivo.
Durante su primera recuperación, Alan fue inducido a un coma farmacológico. Su familia le pasaba goles y canciones de Boca Juniors, el club del que es hincha, y de Karina, La Princesita.
Ayer, con motivo de los Carnavales del Bicentenario, Alan pudo conocer a Karina, en un encuentro sumamente emotivo.
Alan le contó que su música fue lo que lo sostuvo los 6 meses que pasó en el Hospital Sanguinetti esperando que el ex intendente Nicolás Ducoté gestionara el cardiodesfibrilador, la misma música que su familia le ponía en el 2013.
Esperando la llegada del aparato que le permitiría seguir viviendo, y ante el riesgo de contraer una infección intrahospitalaria, Alan se refugió en la música de la cantante que ayer hizo bailar a más de 30 mil pilarenses.
Fue gracias a la ayuda del actual intendente Federico Achával, que como concejal, se puso en contacto con Edit, la abuela del joven, y así consiguieron que lo trasladaran al hospital platense, donde lo sometieron a varias operaciones para salvarle la vida.
Ayer Alan, quien se acercó como otros miles de pilarenses al Polideportivo Municipal, pudo cumplir el sueño de conocer a una de sus artistas favoritas. Un encuentro más que emotivo, en donde el joven pilarense habló con su ídola y en el que, emocionada, Karina invitó a Alan a nunca dejar de seguir a su corazón.
