El balance de ingresos y egresos de la Comuna del año pasado sigue generando encontronazos entre sectores de la oposición y el oficialismo.
El Frente Pilarense, integrado por los ediles Santiago Laurent y Federico de Achával, denunció que, en el marco del análisis de los documentos a los que tuvieron acceso, se encontraron con pagos a monotributistas por 9 millones de pesos, cuyas labores no se conocen.
Además, indicaron que hay proveedores vinculados a familiares de funcionarios de alto rango, y expusieron el caso de una librería, propiedad del padre de la Contadora Municipal, Carolina Hildt.
En cuanto al pago a particulares, que se dieron en el marco de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat, Laurent expuso que cando quisieron indagar más a fondo les negaron los datos.
"Gastaron $9.500.000 en monotributistas, es decir, gente que supuestamente brindó algún tipo de servicio. Cuando buscamos las facturas de algunos de ellos, nos encontramos con que ni siquiera tienen domicilio en Pilar. Cuando quisimos seguir investigando, no nos dejaron acceder a más información y apuraron la sesión (en la que se aprobaron los números)", aseguró Laurent.
Algunas de esas facturas mencionan en el detalle “Honorarios por Capacitación”, con montos que oscilan entre los 18 mil y los 30 mil pesos.
"Lo que más indigna es que el origen de esos fondos, es del Programa de Asistencia Alimentaria a Indigentes. Es decir, que en vez de usar ese dinero para la gente que verdaderamente lo necesita, se paga a monotributistas que ni sabemos qué funciones cumplen. El presupuesto de la Secretaría preveía $1.000.000 en monotributistas, pero se gastaron $9.000.000. Se gastan la plata de la gente y se les ríen en la cara”, disparó Laurent.
Achával, por su parte, agregó: "La gente quiere saber en qué se gasta su dinero, y está en todo su derecho. Cuando se administran los recursos del Estado, se administran los recursos de los pilarenses; por eso hay que rendir cuentas y explicar. Desde nuestro espacio vamos a seguir pidiendo explicaciones y exigiendo que se hagan las cosas como se debe".
Por último, Laurent dijo que "Estos son casos que muestran la manera de proceder del Municipio. Nos preocupa que se puedan utilizar las peores prácticas de la administración pública para desviar fondos. Vemos procedimientos sospechosos y poco claros".
Laurent también habló de la ONG Construyendo Familia y Futuro que cobró $1.200.000, contrato que fue defendido por la Comuna, y agregó que hay vínculos familiares entre algunos proveedores y funcionarios de alto rango.
"Es muy sospechoso pagarle más de un millón de pesos a una ONG que casualmente fue creada un mes antes. Se sabe cómo funcionan estas prácticas de vaciamiento del Estado", disparó. Y agregó "No es serio gastarse esa cantidad de dinero en un informe de 6 páginas con datos sacados de internet. Al menos no es la eficiencia ni la excelencia de la que se jacta este gobierno".
Además, señaló que encontraron una boleta por casi 12 mil pesos de una librería propiedad de un familiar de la Contadora Municipal, Carolina Hildt.
"Hay una factura por $12.000 que es el padre de la contadora, y la dirección de la supuesta librería, es una casa. No sabemos cuántos casos como ese hay. No es necesario esperar al (análisis) del Tribunal de Cuentas, a la gente le basta con mirar la factura para saber cómo son las cosas", finalizó.
“No hay incompatibilidades”
En contacto con Pilar de Todos, la Secretaria de Hacienda, Cecilia Cabrera, admitió que el proveedor es padre de la Contadora, pero expuso que no hay incompatibilidad, y que por ende no se puede objetar la compra.
“Un funcionario obviamente no puede ser proveedor de la Comuna. Y tampoco un familiar de funcionario con quien comparten patrimonio, como por ejemplo un matrimonio legalmente constituido. Pero un padre no comparte patrimonio con su hijo, hay un sinfín de jurisprudencia al respecto. De hecho, este proveedor viene desde la intendencia de Alberto Alberini, y al ser nombrada contadora Hildt averiguamos si es que podría haber algún inconveniente, y el propio Tribunal de Cuentas nos dijo que no, que no hay incompatibilidad”, refutó Cabrera.
“Y si en el lugar de domicilio hay una casa, es porque no se trata de una librería de atención al público, sino de una distribuidora. Los precios eran los más convenientes para la Comuna, y por eso se hizo esa compra”, agregó la funcionaria.
El artículo 156 de la Ley Orgánica de las Municipalidades en su inciso 10 establece que (…) “será responsabilidad del Secretario del ramo y del Contador Municipal comprobar y certificar que la operación se encuadra en el nivel de precios y condiciones habituales de mercado”.
Es decir que habría relación directa entre la compra y el rol de la Contadora, lo que sí se ubicaría en una incompatibilidad.
Sin embargo, Cabrera expuso que el artículo 156 opera para determinadas compras directas sin tope, como de impresión, artículos exclusivos, artistas, o compras a otras áreas del Estado, donde se requiere que los valores se certifiquen.
“La persona que tiene la competencia de decidir una comprar es el Director de Compras, acá se trata de una compra menor de librería, donde no hay que certificar los precios. No podría ser la propia Hildt proveedora del Municipio, y tampoco su esposo si es que están legalmente casados, por ejemplo, pero no es este el caso. Entiendo que se haga la denuncia mediática, así es la política, pero si pretendieran hacer una denuncia ante el Tribunal de Cuentas, sería improcedente, porque no hay incompatibilidad”, insistió Cabrera.