Los comerciantes del centro de Pilar están que trinan con los sucesivos cortes de calles que se vienen dando en los últimos días, lo que, aseguran, impacta negativamente en el nivel de ventas.
La situación se produce puntualmente en el denominado casco histórico, sobre la calle Rivadavia, en las inmediaciones al Palacio Municipal y en zonas aledañas.
En menos de una semana, esos sectores fueron cerrados a la circulación en cuatro oportunidades y por varios motivos.
Algunos de ellos fueron las vallas que aparecieron el pasado 7 de diciembre en el que, también con un inusitado operativo de seguridad, se pretendió evitar el acceso al Municipio de vecinos que reclamaban por la instalación de termoeléctricas, y cuya intención era acceder a la sesión que se celebraba en el recinto del Concejo Deliberante.
Después, fue el turno de una nueva clausura de la zona esta vez por el acto de asunción de los nuevos concejales. Desde la mañana temprano del pasado lunes, otra vez las vallas de contención fueron las protagonistas.
Otro día de corte se vivió el pasado miércoles cuando las inmediaciones de la Plaza 12 de Octubre quedaron cerradas para que se pueda desarrollar una exposición de colectivos antiguos.
Y la gota que rebasó el vaso fue este viernes cuando otra vez la circulación quedó impedida por una exposición de motocicletas y el desarrollo de la última edición del programa de Ferias Urbanas.
"Estos cierres de las calles están preocupado a los comerciantes de la zona. En esta época en la que se esperan las fiestas de Navidad y fin de año, esas medidas pueden impactar negativamente en las ventas", expresaron desde la Cámara de Comerciantes de Pilar (SCIPA), donde aseguraron que ya enviaron una misiva al intendente para alertarlo sobre la situación.
Enojo por la competencia desleal
Otro de los puntos que puso, una vez más, en alerta a los comerciantes es el despliegue de puestos sobre la plaza con ofertas de servicios de gastronomía y venta de productos no artesanales.
"Nos causa sorpresa que mientras a los comercios legalmente habilitados se le exigen todas las normas de seguridad e higiene, certificado de bomberos, normas de facturación, ahora tengamos dentro de la plaza gazebos con oferta de servicios de gastronomía y venta de productos no artesanales", se quejaron.
Asimismo, aseguraron que no se trata de eventos esporádicos sino que por el contrario están allí "casi todos los fines de semana".
"Esperamos que los funcionarios que autorizaron estos gazebos cambien de actitud respetando las leyes en vigencia", reclamaron desde SCIPA.