El Concejo Deliberante de Pilar aprobó por mayoría una ordenanza que prevé que los vecinos que hayan encarado con sus propios fondos mejoras en las calle, sean eximidos del pago de la tasa de Mantenimiento de la Vía Pública y Servicios Generales (ex ABL).

La iniciativa contó con el apoyo de todas las bancadas, menos la de Cambiemos, por lo que hay dudas respecto a si el intendente Nicolás Ducoté terminará por aceptar la iniciativa, al promulgarla, o vetarla.

“Ante el mal estado de distintas calles, de imposible tránsito e inaccesibles para patrulleros, ambulancias, colectivos o remises, que atentan al normal desarrollo de las actividades cotidianas, se logró la sanción de una ordenanza que establece una quita total o parcial del tributo por el plazo de 12 meses corridos fijados desde la fecha en que los frentistas hayan hecho por su cuenta esas mejoras”, señaló el concejal Adrián Maciel, titular de la bancada del massismo.

El texto prevé que se creará un Registro Único de Contribuyentes de la ciudad Del Pilar, en donde conste que hayan realizado erogaciones en forma particular para el arreglo de calles y problemáticas similares de su barrio, y que autorizará una vez acreditado fehacientemente el aporte vecinal la quita de tasas.

La iniciativa de Maciel fue a instancias de un pedido del senador massista Jorge D’Onofrio, quien también se había mostrado preocupado por esta situación.

“Creemos en la justicia social y esta iniciativa representa fielmente esa equidad para muchos vecinos que necesitan respuestas ante el aumento constante de preocupaciones, esperemos que el Ejecutivo la implemente en tiempo y forma”, afirmó Maciel, quien se mostró sumamente molesto para con la bancada de Cambiemos, desde donde rechazaron la idea: “Son una máquina de oponerse”.

La ordenanza, finalmente, excluye a barrios cerrados, clubes de campo y centros comerciales, según modificaciones que solicitaron otras bancadas opositoras, y será el Departamento Ejecutivo, por su parte, determinara el Órgano de Aplicación, aunque aún resta saber si el intendente la promulgará.

“La incidencia en la recaudación es mínima, pero es importante para el vecino, al que hay que reconocerle el esfuerzo que hizo ante la ausencia de respuestas por parte del Estado”, concluyó Maciel.