Unas 80 familias fueron desplazadas la semana pasada de terrenos, en el marco de un proceso judicial. Aseguran que compraron de buena fe.

Participaron más de 600 efectivos policiales en un predio de 15 hectáreas, donde se ubicaron 80 familias.

Las aprehensiones se dieron luego de la denuncia de una mujer, quien advirtió sobre la presencia de desconocidos en su vivienda.

Los aprehendidos vendían parcelas y luego desalojaban a los compradores mediante amenazas con armas de fuego, según aseguraron víctimas.

Decenas de personas ingresaron a una urbanización cerrada de Pilar con el objeto de tomar terrenos.

Una mujer advirtió a las autoridades que desconocidos habían tomado un campo de su propiedad y estaban erigiendo casillas. Los uniformados pudieron frenar el ilícito.

Varias personas comenzaron a dividir y a desmalezar parcelas lindantes la cauce, pero fueron advertidos por la Policía y algunos de ellos aprehendidos.

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