Un sargento de la Policía Federal detenido el mes pasado en Pilar por corrupción de menores, suma más causas por hechos similares.
Se trata de Martín Aguirre, de 46 años, quien fue aprehendido por agentes de la Sub DDI de Pilar, a raíz de una investigación por abuso contra un menor de edad, en Villa Rosa.
La primera denuncia contra el policía señaló que un menor de 15 años caminaba por Pilar cuando el acusado frenó su auto y le ofreció llevarlo hasta el lugar a donde tenía que ir. El adolescente aceptó y cuando subió al vehículo vivió un momento terrorífico: le mostró una serie de videos pornográficos y luego intentó tocarle el pene.
Pese a que la víctima logró escapar, le contó lo sucedido a su mamá y realizaron la denuncia correspondiente en la UFI de Género de Pilar.
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Ya en un primer momento había trascendido que el sujeto tenía causas similares, como una registrada en 2012, donde está acusado de haber tocado a un chico de 13 años en un edificio de PAMI.
Pero a estos dos casos se le suman otros, donde el presunto abusador actuaría de la misma manera.
“Sin dudas estamos ante un ‘chacal’ que elegía como víctimas a adolescentes varones. Un abusador serial”, afirmó una fuente de la investigación a La Nación.
Los casos
Desde la UFI de Género de Pilar ya estaban investigando a Aguirre desde hace dos años.
Se lo acusa de un hecho similar, en Villa Rosa, contra un adolescente de 14 años.
De acuerdo a la investigación, Aguirre interceptó al menor, quien se encontraba cerca de una parada de colectivos, y le pidió ayuda para bajar música y videos en su celular.
“Con la excusa de que en la calle no tenía buen servicio de Internet, convenció a la víctima para que ingresara en su casa. Cuando estaban en el living, Aguirre comenzó a reproducir en el teléfono un video pornográfico. El adolescente comenzó a sentirse incómodo y evitó ver las imágenes. Pero la situación empeoró porque el sindicado delincuente sexual comenzó a tocarse en sus partes íntimas. Finalmente, el muchacho logró escapar”, reconstruyó al mismo medio una fuente judicial.
Pero habría más casos. Uno de ellos es contra un menor de entre 12 y 13 años, quien también se dirigía a la parada del colectivo, en concreto a la de la línea 57, para ir a su casa.
En un momento, fue interceptado por Aguirre, quien le preguntó cómo llegar a la ruta 25, al tiempo que le ofreció alcanzarlo hasta el punto donde paraba el ómnibus.
“En el trayecto, el sospechoso frenó a la altura de la iglesia de la Sagrada Familia, en La Lonja, y le exhibió al adolescente videos pornográficos que tenía guardados en su teléfono celular, lo manoseó y abusó sexualmente de él”, señalaron las fuentes del caso.
Otro ataque ocurrió en julio del año pasado, donde de igual manera a los otros hechos el sargento interceptó a un adolescente, lo hizo subir al auto y le mostró videos pornográficos.
El integrante de la PFA se negó a declarar, y en las próximas horas la fiscalía de Género, a cargo de Manuel Cayuela, pediría su prisión preventiva.