El último fin de semana, la Fórmula 1 Light completó la segunda final del año, disputa que en su momento, había sido reprogramada por las malas condiciones en pista debido a la lluvia.
La categoría solo debía correr la final, por lo que todos los pilotos, se dirigieron al Gálvez a correr la definición. Entusiasmado por la nueva planta impulsora, el pilarense Juan Martin Pintos se alistaba para correr y terminar entre los puestos de punta.
A pesar de ello, las fallas en el carburador volvieron a aparecer. En medio de la competencia, uno de los autos de la otra categoría, tuvo problemas en la admisión y comenzó a expulsar líquido sobre la pista. De esta manera, el local que venía detrás comenzó a perder adherencia hasta el punto de entrar en trompo en la zona de la horquilla en la vuelta siete.
Al momento de regresar, el motor no respondió y tuvo que despedirse de la competencia con las manos vacías. “El auto venía funcionando bien hasta el primer ingreso del auto de seguridad. Desde ese momento la falla apareció y creció más y más”.
“La categoría en ningún momento apercibió al otro competidor, es más, aseguró que no fue un error que siguiese corriendo”, contó frustrado Pintos. Al mismo tiempo, el de Pilar confirmó: “Asumo el error de no haberme quedado un poco atrás para evitar los fluidos. Ahora solo resta revisar la potencia del motor para regresar a los primeros puestos del pelotón”.
Con respecto al auto, Pintos declaró que “el motor a pesar de las fallas que se presentaron iba bien. Suponemos que vamos a ir con el mismo impulsor un par de fechas más, pero tendremos que sacarle el mayor potencial para prendernos en el pelotón. Creemos que un juego de neumáticos nuevo para la próxima fecha sería lo ideal para hacer mejor tiempo”.
El campeonato continuará el 17 y 18 otra vez en el autódromo Oscar y Juan Gálvez, aunque todavía no está confirmado el circuito que se utilizará.

Fuente: Prensa Juan Martin Pintos