El gobierno de la Provincia de Buenos Aires empezó una campaña que tiene por objeto concientizar a la gente de cara a las Fiestas de Navidad y Año Nuevo.
El objeto es que esos encuentros no se constituyan en focos de contagios de coronavirus y por ende evitar rebrotes de casos de COVID-19.
Además del cumplimiento de otras medidas claves, como el lavado de manos, el uso de tapabocas, el distanciamiento, y el realizar los encuentros al aire libre o en espacios fuertemente ventilados de manera natural (sin el uso de aire acondicionado), el pedido tiene que ver con solicitarle a las personas que se aíslen o reduzcan al máximo la movilidad 2 semanas antes de los festejos.
Si bien el pedido es para toda la población, que solo quedará en el plano de la recomendación y no de un decreto obligatorio, se apunta a que sea llevada a cabo con más fuerza en familias o grupos donde haya personas mayores a 60 años o menores de esas edad pero con patologías de base.
"Las fiestas son un momento ideal para disfrutar en familia, evitemos que se conviertan en un foco de contagio", expuso el gobernador Axel Kicillof.
"La pandemia todavía no terminó y con la vacuna tan cerca no podemos relajarnos", añadió el mandatario bonaerense.
"Lanzamos recomendaciones para pasarlas en familia. Le agregamos que si se van a reunir con parientes de mas de 60, los días previos eviten tener reuniones, para no contagiarse ni contagiar, y evitar tragedias. Una especie de cuarentena que nos permita llegar a la Nochebuena y Año Nuevo sanos", insistió Kicillof en contacto con el canal C5N.
Además de resto de las medidas ya mencionadas, también se pedirá que las Fiestas se lleven a cabo con personas de grupos familiares reducidos y no con desconocidos, para que funcionen como especies de "burbuja" y se pueda trazar rápidamente quiénes son los contactos estrechos de quienes puedan dar positivo.