Sábado, 09 Septiembre 2017 04:00

Derrota y polémica

En un cotejo que tuvo de todo, Barracas derrotó al Águila 3-2 con dos goles de Juan Martín y uno de Mandarino. Molina Fariña y Schinnea marcaron para el Cuervo.

Fénix llegaba a la segunda fecha buscando la recuperación tras la derrota ante Tristán Suárez. Mientras que Barracas llegaba entonado tras el debut victorioso ante Acassuso. El arranque del partido fue entretenido, ya que la mitad de la cancha era zona de tránsito, se disputaba un encuentro de ida y vuelta. Barracas era más peligroso a la hora de atacar al desnudar las falencias en el retroceso de Fénix.

El Cuervo en ataque mostraba la constante movilidad de Romero, trasladándose por las bandas, se hacía indescifrable para el mediocampo visitante. A los 15´, tras una buena triangulación, Milla avisaba con un remate apenas por encima del travesaño. Un minuto después llegó la primera emoción para la visita. A la salida de un córner, Juan Martin conectaba una pelota suelta y ajusticiaba a Rodríguez, estampando la victoria parcial.

El gol obligó a Fénix a adelantarse en el campo, a los 26 minutos Milla sorprendió con un derechazo desde una zona con poco ángulo, exigiendo a Migliore. En la posterior jugada, desde la salida de un córner, Pedroza reventó el travesaño, y en el rebote se encontró Molina Fariña con el arco a su merced para sellar el empate.

El conjunto de Fabián Lisa tenía muchos problemas en las pelotas quietas. A los 38´ desde una pelota parada, German Mandarino apareció con absoluta soledad en el primer palo para poner arriba una vez más al elenco de Giunta y decretar la victoria parcial en la primera etapa.

La segunda etapa comenzaba con Barracas como protagonista, mientras que Fénix no encontraba los caminos y para colmo se quedó con 10 cuando el árbitro Barraza observó un golpe sin pelota de Romero a Mandarino. Lisa advirtió la confusión de su equipo y rápidamente mandó a la cancha a Iñiguez y Colitto para cambiarle la cara a Fénix.

La actitud del local sería otra ya que a los 22 minutos Milla habilitó a Schinnea para igualar las acciones. Al quedarse con 10, el Cuervo jugaba mejor que su rival, un tremendo cabezazo de Milla le movía la estantería a Migliore, y luego un remate cruzado nuevamente del ex Chacarita hacía lucir al ex arquero de San Lorenzo.

La polémica llegó en el cierre del encuentro, porque en tiempo adicional Pedroza tomaba en el área a Pastafiglia a la vista de Barraza, y el juez cobró penal para el visitante. El encargado de firmar el gol fue una vez más Juan Martin, sellando la victoria para el elenco Guapo. Esto produjo la bronca de todo el banco local contra el juez del encuentro, incluido Fabián Lisa, que salió despedido del banco una vez finalizado el partido.

Con este resultado, Barracas Central está arriba de todo en la tabla mientras que Fénix sumó su segunda derrota al hilo y buscará mejorar en las próximas fechas.


La bronca con Barraza

Sin dudas el partido se le iba escapando de las manos a Barraza a medida que pasaban los minutos. El árbitro estuvo bien en las dos expulsiones (ambas fueron agresiones sin pelota), pero también dejó pegar bastante. Celoso en su actuación, cada falta en contra de Fénix generaba el enojo de todo el banco local.

La gota que rebalsó el vaso se produjo en el tiempo adicionado. Cumplido el primer minuto de los cuatro, tras un tiro libre desde la izquierda, Barraza observó un agarrón en el área y no dudó en decidir la pena máxima para Barracas. Esa determinación generó la irritación total en Lisa, que descargó toda su bronca con el techo del banco de suplentes, insultos al aire y patadas a lo que encontraba en su camino.

Una vez convertido el gol de Juan Martín, Fénix movió rápido del medio y a los ponchazos se llevó por delante a Barracas en busca de la igualdad. Un terrible frentazo de Milla sacudió el travesaño y dejó sin respuestas a Migliore, pero en el rebote apareció Schinnea para estampar el empate.

Todo era festejo para el local, pero Barraza cobró una falta a favor del Guapo alegando que el delantero de Fénix se abalanó sobre el defensor para convertir la igualdad. Esta última acción del juez provocó el descontrol de Lisa y su cuerpo técnico. Discusiones cruzadas y pulsaciones a mil decretaron un final caliente en San Miguel, con muchísimo disconformismo con el árbitro y sus asistentes.


Fuente: Soloascenso.com.ar

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