“El último Primer Día” se llama el festejo que desde hace algunos años hacen los chicos al iniciarse el ciclo lectivo del último año de la secundaria.
Generalmente se reúnen el día anterior al comienzo de las clases, y parten todos juntos a la escuela, disfrazados, aplaudiendo y cantando.
Pero lo que en un inicio fue un modo de recordar esa jornada todos juntos, se tornó en muchos casos en fiestas donde abunda el ruido, el descontrol, el alcohol.
Así lo vivieron esta mañana varios vecinos de Pilar y Del Viso, que desde las 5 y media de la mañana comenzaron a denunciar ruidos molestos.
Por ejemplo autos circulando por ruta 26 a toda velocidad, gritos de chicos y chicas, e incluso bombos y platillos, cuando aún el sol no se había asomado.
“Me desperté sobresaltada antes de las 6 de la mañana, con el ruido de una pseudo murga avanzando por la calle. No lo podía creer; me asomé y vi a decenas de chicos de escuelas de la zona gritando en medio de la calle, corriendo, saltando, y muchos en claro estado de embriaguez”; contó a Pilar de Todos Norma Ruiz, quien vive cerca de la ruta 26.
“Sé que es un momento lindo de los chicos, que están iniciando el fin de una etapa, pero todo es pretexto para el descontrol. No me parece lógico, y menos que nosotros tengamos que vivir estas cosas”, agregó.
En Pilar la situación fue similar. Decenas de chicos cantando y gritando, en la Plaza 12 de Octubre, horas antes de ingresar a las aulas.
“Tremendo el ruido que hicieron los chicos con la excusa del ‘Último Primer Día’. Si el Estado no toma cartas en el asunto, esto se va a desmadrar”, expuso, por su parte, Luis Manrique, vecino de la calle Belgrano.
“Cuando no es fin de curso, es el comienzo. Me parece que a los chicos hay que ponerles un poco de límites. Se lo toman como una despedida de soltero. Los entiendo, porque fui joven, pero tienen que entender ellos también que no es lógico salir a hacer cosas así en medio de una ciudad que aún no despertó, y encima le suman, como poco, el alcohol”, agregó.
Sin embargo, no todos fueron rechazos. Varios vecinos e incluso padres de chicos apoyaron los festejos, desmintieron que haya habido desmanes o molestias para el resto de los vecinos, y expusieron que los chicos deben encarar con alegría el último tramo de la secundaria.
"Yo acompañé a mi hija de 17 años al festejo, y no hubo alcohol ni nada de drogas, como muchos dicen. Son chicos que encaran este proceso de una manera divertida, sabiendo al mismo tiempo que en pocos meses se despiden de una etapa muy linda, para encarar otra que conlleva un sinfín de responsabilidades, como lo son el mundo del trabajo y los estudios terciarios y universitarios", contó Gabriela Cuellar.
Regular
El Defensor del Pueblo adjunto de provincia de Buenos Aires, Walter Martello, propuso comenzar a desarrollar una estrategia conjunta que incluya a la Dirección General de Cultura y Educación, al Ministerio de Educación, de Salud de la Provincia y de la Nación y a los 135 municipios de la Provincia con el objetivo de realizar campañas de control, prevención y concientización de cara al “Ultimo Primer Día”.
Martello, que está a cargo del Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos de la Defensoría, remarcó que el último estudio de la Sedronar ha detectado que “aumentó el consumo de sustancias ilícitas y abuso de alcohol en la población de entre 12 y 17 años: de los niños y adolescentes que consumieron alcohol en el último mes, 1 de cada 2 lo hizo de forma abusiva. Esto representa 82.453 niños y adolescentes”.
Según el defensor del Pueblo adjunto, otros indicadores preocupantes es que en la Argentina “hay 2.299.598 nuevos consumidores de alcohol en el último año, de los cuales 319.994 son preadolescentes y adolescentes. A su vez, en comparación al 2010, se triplicó la presencia de cocaína entre los jóvenes de esta franja etaria. Y el consumo de éxtasis en niños y adolescentes aumentó un 200%”, dijo Martello.
“Por lo que estuvimos analizando, existe una desarticulación entre los distintos niveles del Estado para abordar este flagelo. En los últimos años se registraron distintos tipos de incidentes durante la celebración del Ultimo Primer Día, lo que exige que haya una presencia activa del Estado en todos sus niveles dado que está en juego, principalmente, la salud de miles de jóvenes y adolescentes”, apuntó Martello.
El ex legislador consideró que “existen iniciativas en municipios como Chivilcoy y Mar del Plata que establecieron programas especiales por El Ultimo Primer Día”, pero necesitamos un abordaje integral que nos sirva para prevenir las adicciones en la población juvenil y para dar un mensaje de que las drogas y el alcohol nada tienen que ver con la diversión”.