El nuevo “Protocolo para el Ingreso de Acompañantes de Personas Internadas por Sospecha y/o Confirmación De Covid-19” quedó aprobado, tras ser publicado en el Boletín Oficial de la provincia de Buenos Aires bajo la firma del ministro Daniel Gollán.
El protocolo promueve prácticas de cuidado integrales y establece que la institución médica deberá garantizar la disponibilidad de insumos de protección personal, información sobre el protocolo en todos los sectores y servicios involucrados, y espacios adecuados para el cumplimiento de las medidas preventivas.
Podrán ser acompañantes aquellas personas que sean mayores de edad y no presenten síntomas asociados a COVID-19.
Además, no presenten condiciones de riesgo para COVID-19: siendo algunas de estas el tener una edad mayor de 60 años, tener insuficiencia cardíaca, enfermedad coronaria, valvulopatías y cardiopatías congénitas. Padecer una enfermedad pulmonar crónica (asma moderado o severo, epoc, enfisema congénito, displasia broncopulmonar, bronquiectasias, fibrosis quística). Sufrir una enfermedad renal crónica en diálisis o con expectativas de ingresar a diálisis en los próximos 6 meses. Tener diabetes o inmunosupresión. Tampoco podrán ingresar embarazadas ni personas obesas (con un Índice de Masa Corporal superior a 40)
Hayan sido capacitados en la correcta utilización de Equipos de Protección Personal (EPP).
Sólo se permitirá el ingreso de una persona por paciente. La misma deberá maximizar las medidas de higiene personal e higiene respiratoria.
Entre los requerimientos que se solicita a quien ingrese se pedirá:
No compartir utensilios, alimentos ni bebidas con el paciente; utilizar barbijo quirúrgico, protección ocular, camisolín y guantes mientras dure su estadía; respetar el distanciamiento físico en todo momento que dure su estadía como acompañante.
Además, no podrá transitar por otros espacios del establecimiento. Una vez que el/la acompañante ingrese a la habitación debe permanecer allí, sin que se permita su paso por pasillos u otros lugares del hospital.
En el momento de comer y/o beber, acompañante y paciente deben realizarlo en distintos momentos. Mientras uno come o bebe la otra persona debe permanecer con barbijo y mantener una distancia mínima de 2 metros.
En caso de pasar la noche en la habitación, deberá dormir al menos a 2 metros de distancia de la persona internada.
Una vez que abandona el hospital debe comprometerse a hacer el aislamiento en su domicilio bajo las condiciones previstas para toda persona considerada “contacto estrecho” según lo estipulado por el Ministerio de Salud.