El flojo momento de Real Pilar en el campeonato lo obligaba a quedarse con un triunfo que le permita recuperar la tranquilidad y confianza de cara al cierre de la primera etapa del torneo de la Primera D.
En ese contexto enfrentó a Puerto Nuevo, pero las cosas no salieron como esperaban. La caída por 2-0 desnudó falencias graves que lo hicieron caer en la zona más temida de la tabla de los promedios.
La primera parte fue un monólogo de Puerto Nuevo. El conjunto campanense controló el balón y tuvo varias situaciones para abrir el marcador, pero no estuvo fino a la hora de la definición. Al Monarca, en cambio, le costó tomar la iniciativa y de regalo no se fue en desventaja al descanso.
Pero en la segunda etapa llegaron los festejos del local. Germán Águila primero y Orlando Sosa después, decretaron el 2-0 para brindarle respuestas y tranquilidad al Portuario, que hizo los méritos necesarios para quedarse con un triunfo muy festejado. Para el elenco de Pilar, en cambio, fue otro duro cachetazo que deberá corregir cuanto antes debido a su urgencia en los promedios.
La nota negra y llamativa de la jornada fueron las cinco expulsiones que mostró Salomé Diorio. El Monarca terminó con ocho por las salidas de Kevin González, Leonel Rodríguez y Rodrigo Díaz; mientras que Puerto finalizó el choque con nueve debido a que Tadeo Mac Intyre y Germán Águila vieron la roja.
Fuente: Soloascenso.com.ar